Australia70 - 82España España sumó su segunda victoria en el torneo olímpico tras derrotar a una Australia que sólo dio guerra en la primera mitad. Fue cuando los de Scariolo aún no se había despertado. Sí lo hicieron tras el descanso y un ciclón rojo de 10 minutos se llevó por delante al rival. Triunfo de mérito por la diferencia más que por la continuidad, sin Navarro y con tiempo de descanso para los referentes del equipo. Ideal para seguir creciendo.
Pese a todo, España se llevó cinco puntos de ventaja al descanso (32-37). No estaba mal para el juego exhibido. Justo antes de marcharse a los vestuarios, Rudy se hizo una brecha en la cabeza. Tratando de salvar un balón que se escapaba por el fondo, acabó en el suelo y en la caída se golpeó con el objetivo de un fotógrafo. Parece que este equipo no gana para sustos. Todo cambió en la reanudación. España se puso a apretar en defensa y regresaron las ideas en ataque.
La selección volvió a sus señas de identidad y el partido se rompió. Australia no anotó en seis minutos y, con el descanso de por medio, recibió un parcial de 0-13 que le dejó tiritando (32-47). Protagonista, el de casi siempre: Pau. Al tran-tran, sin grandes alardes hizo nueve puntos en cinco minutos. Llegó a los 20 y resolvió. A falta de Navarro, Rudy fue su mejor cómplice. Tres triples del alero y un contraataque culminado con un mate llevaron la renta hasta los 24 puntos (37-61). El colofón lo pusieron los mates de Ibaka y las asistencias de Sergio. Los guerreros de Australia, tan complicados de derrotar en los dos amistosos de preparación, sólo lograron ponerse a 10 ante la relajación española.