LOS DIABLOS SE ESCAPAN VIVOS

Injusto empate (1-1) el cosechado por el Real Madrid en el encuentro de octavos de final ante el Manchester United. Los blancos fueron muy superiores al conjunto de Ferguson, pero su falta de acierto les jugó una mala pasada. Welbeck adelantó a los ingleses y Cristiano Ronaldo puso el empate.

Espectáculo puro. Eso es exactamente lo que fue el choque de trenes del Santiago Bernabéu. El partido no defraudó ni un ápice, tarea difícil teniendo en cuenta las enormes expectativas que se tenían puestas en él. Sin embargo, tuvo un pero: la dificultad del Real Madrid para materializar las ocasiones de gol.

Los locales fueron superiores en todo momento aunque el marcador no refleje tal cosa. Los de Mourinho empezaron el encuentro a mil revoluciones, acobardando a un Manchester United que achicaba balones en busca de sus puntas. Kagawa, Van Persie y Welbeck fueron los encargados de intentar sacar petróleo de esos balones rechazados por los red devils.

Como era de esperar, dado el inicio del choque, fue el equipo blanco quien gozó de la primera ocasión clara de gol. Coentrao se hizo dueño de un rechace en el área visitante, armó la pierna y se sacó un remate que a punto estuvo de suponer el primer tanto de los suyos. De Gea desvió el balón lo justo para que este se paseara por la línea de gol sin llegar a entrar. En la segunda parte se volvería a repetir esta acción con la misma fortuna para los ingleses.

A pesar de esta superioridad, quien inauguró el marcador fue Danny Welbeck, haciendo bueno el dicho de que quien perdona lo acaba pagando. El delantero de origen ghanés se benefició de los problemas legendarios del Madrid en los saques de esquina para poner por delante a los suyos en la eliminatoria. El Manchester United se vio adelantado en el marcador sin hacer prácticamente méritos por que sucediera.

Con el castigo asumido, el Real Madrid siguió a lo suyo, sin que sus líneas se resquebrajaran tras el golpe recibido. Lo mejor para los locales es que el empate tardó solo diez minutos en llegar. El encargado de llevar las tablas al marcador fue el protagonista indiscutible del encuentro: Cristiano Ronaldo. El gol fue un calco de aquel que dio la última Copa del Rey a los blancos frente al Barcelona. Di María centró desde la banda izquierda para que el portugués se elevara y rematara a placer.

El empate, sin embargo, sentó mejor al conjunto inglés que a los madridistas. Los de Alex Ferguson disputaron sus mejores minutos al final de la primera mitad, aunque su despliegue tampoco dio frutos. Tras el paso por vestuarios, el partido no varió en nada el guión. El Real Madrid se mantuvo fiel a sí mismo, desplegando gran parte de su juego en área rival. Coentrao y Cristiano Ronaldo tuvieron el gol de la victoria en sus botas, aunque finalmente el marcador no se movió.

El desacierto deja sin premio al Madrid
Los blancos fueron víctimas de su desatino de cara a portería, un mal que les persigue en todas las competiciones esta temporada, y del cansancio acumulado por gran parte de sus jugadores. Especialmente destacada fue la actuación de Coentrao y Özil. El cerebro del alemán fue el encargado de manejar los hilos del Madrid de principio a fin, aunque al final las piernas no dieron para más.

El empate no hace justicia a lo acontecido sobre el terreno de juego. Los de Mourinho fueron infinitamente superiores al Manchester United, pero tendrán que ganarse su pase a cuartos de final en Old Trafford, un hecho con el que los blancos, probablemente, ya contaban.

Real Madrid
1 41-Diego López; 17-Arbeloa, 2-Varane, 4-Ramos; 5-Coentrao; 14-Alonso (3-Pepe 84') , 6-Khedira ; 22-Di María (19-Modric 75'), 10-Ozil, 7-Ronaldo ; 9-Benzema (20-Higuaín 60')
Manchester United
1
1-De Gea; 2-Rafael, 5-Ferdinand, 6-Evans, 3-Evra; 4-Jones, 16-Carrick; 19-Welbeck (7-Valencia 73'), 10-Rooney (8-Anderson 84'), 26-Kagawa (11-Giggs 64') ; 20-Van Persie
Goles: 0-1 20' Welbeck, 1-1 30' Ronaldo
Árbitro: Feliz Brych (Alemania). Amonestó en el Manchester United a Van Persie 5', Rafael 40' y Valencia 88'
Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la UEFA Champions League disputado en el Estadio Santiago Bernabéu (Madrid) ante 85.454 espectadores